Pollo al vino con morillas

El pollo al vino con morillas es una opción clásica, que combina lo mejor de la gastronomía reconfortante con un toque de elegancia. Esta receta, perfecta para festividades y celebraciones, resalta el sabor del pollo en una rica salsa de vino y morillas que deleitará a todos tus invitados. Acompañado con una guarnición de pâtes fraîches, este plato se convierte en el protagonista de una mesa festiva, repleto de sabores inigualables y aromas irresistibles.

Esta receta de pollo al vino es una de esas recetas atemporales que une lo reconfortante de la cocina casera con la elegancia de los platos festivos. El vino, ingrediente esencial en esta receta, aporta una complejidad única al paladar, infundiendo al pollo una profundidad de sabor y una ternura inigualable. Las morillas, hongos con un aroma terroso y un sabor intenso, elevan esta preparación a un nivel superior, añadiendo una textura y sabor característicos a la salsa.

Para aquellos que buscan alternativas, las morillas pueden ser sustituidas por otros hongos de sabor robusto como los shiitakes o las setas porcini, conservando así el carácter de la receta. La elección de una cazuela de cobre como la sauteuse Prima Matera de Buyer no es casualidad. Esta elección asegura una distribución uniforme del calor, permitiendo que cada ingrediente se impregne con el sabor del vino y las morillas de manera óptima, garantizando una cocción perfecta del pollo y una salsa exquisita.

Al cocinar este plato en una cazuela de cobre, experimentamos una amalgama perfecta entre tradición y calidad, asegurando una preparación excepcional donde cada elemento juega su papel para crear un resultado culinario de excelencia. Esta receta es más que una simple preparación, es una invitación a degustar y compartir momentos especiales con un plato que despierta los sentidos y hace de cada comida una celebración.

Cazuela de cobre De Buyer

Ingredientes

• 4 muslos de pollo campero
• 2 o 3 chalotas
• 250 ml de vino blanco joven*
• 120 g de morillas secas
• 60 cl de nata
• 40 g de mantequilla
• 3 cucharadas de aceite de oliva

Preparación 

1. Hidrata las morillas secas durante unos 30 minutos. Para hidratar las morillas secas, puedes sumergirlas en un recipiente con agua tibia durante unos 30 minutos aproximadamente. El agua no debe estar caliente, sino a temperatura ambiente o ligeramente tibia. Es esencial que las morillas se rehidraten completamente y se ablanden antes de utilizarlas en la receta. Una vez hidratadas, pásalas por un colador y agua para retirar cualquier impureza y se reservan para usarlas en la preparación.

2. Pela y pica finamente los chalotes. Reserva.

3. Dora los muslos de pollo en la cazuela Prima Matera de Buyer con un poco de mantequilla y un chorrito de aceite de oliva. Luego, retíralos y reserva.

4. Cuela las morillas de su jugo. Reserva.

5. Mientras tanto, dora los chalotes en mantequilla en la sartén. Añade las morillas cortadas por la mitad y saltéalas unos minutos. Agrega el jugo de las morillas y desglasa con vino amarillo. Deja reducir. Incorpora la crema y luego los muslos de pollo. Cocina a fuego lento durante 40 minutos. Sirve caliente acompañado de pasta fresca.

Notas

• Desglasar es un término culinario que se refiere a añadir un líquido, como vino, caldo o agua, a una sartén o recipiente después de cocinar carne o verduras. Esto ayuda a liberar los sabores que quedan pegados al fondo de la sartén después de dorar los alimentos. Al incorporar el líquido y raspar los trozos dorados del fondo, se agrega sabor y profundidad al plato.
• Para esta receta es típico usar "vin jaune", un tipo de vino amarillo seco y único originario de la región de Jura, en Francia. Se elabora mayormente con uvas Savagnin y se envejece en barricas de roble, donde adquiere su distintivo sabor y aroma. Es conocido por su color dorado y su sabor a nuez característico. Puedes sustituirlo por otro vino blanco idealmente seco.
• Para aquellos que buscan alternativas, las morillas pueden ser sustituidas por otros hongos de sabor robusto como los shiitakes o las setas porcini, conservando así el carácter de la receta.
• Si tienes curiosidad para entender las virtudes de cocinar en cobre y cómo cuidar de estas maravillosas piezas, espero que lo resuelvas todo en el artículo que tenemos aquí.